domingo, 15 de abril de 2012

eso

vamos a dejar que se escriba solo...

...los estados de conciencia, la vida vista en un relámpago, un volcán humeante a punto de hacer erupción... una nube cargada de lluvia, ansiosa de unirse con la tierra... un trueno rugiendo, abriéndose paso en la garganta del cielo... la vida se ejecuta más allá del corazón, se manifiesta en cada onda rítmica que crea, que avanza,  que danza...

¡ perdónanos por olvidarnos del ritmo!
¡exculpa a estas manos marcadas por la desolación, ignorantes de la danza, las alas y  serpientes!...

vamos a enmendar, vamos a extender la realidad, lo posible es más que carne, mas que huesos y tejidos sangrantes... la magia está en el soplo, en el aire contraído, en la pupila dilatada, la cadera dislocada, ¡la piel en llamas! la sensación es mental, y sólo ella puede configurar una realidad... sómos más que la opinión de los demás, a veces el veneno seduce lenguas largas, se enreda, se enamora e inunda la mente.... ten cuidado, no todos los amores son buenos amantes.....

siente... hay una conexión... no estás sólo, ja más  has estado... el viento siempre se compadece de los sin amor, y regala caricias a destajo... siente tus pestañas... cuando quieren, pueden provocar huracanes... o inundaciones... siente tu piel... el abrazo del sol es cálido, sólo hay que querer recibirlo.

quiebra la realidad... desata la ira... el caos es un orden natural, no reprimas tu tempestad... a veces la lluvia debe librarse de la nube... a veces la mente debe despegar del cuerpo... a veces lo correcto es una celda, y equivocarse, la única solución. a veces las palabras se entierran como dagas, y otras veces, las mismas resusitan el alma... ¿te das cuenta? no son las palabras las que cargan la magia, sino el soplo, el aliento... la calidez o los labios partidos.

Respira... deja que entre, pero también que salga. Observa... las pupilas dilatadas muestran más de lo que ves. El universo conspira a tu favor, no lo dudes. no lo dudo.

creemos y creamos. sólo vivimos para aprender.


La niña semilla, ya no del mal.

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